Generalmente descrita como una criatura con cuerpo de león y cabeza y hombros de mujer. Se trata de un ser que aparece en muchas mitologías, estando presente en la griega, egipcia, mesopotámica y en el sur y sudeste asiático, atribuyéndole mucho valor a esta figura.
En la mitología egipcia
En Egipto, las esfinges eran símbolo de la realeza, representando de este modo fuerza y el poder del león, y la vida después de la muerte. Así, la figura de la esfinge parece estar fuertemente relacionada con la deidad solar Sejmet, la leona.
En un principio fue denominada como Sheps-anj, “figura viviente” o “estatua viviente”, después derivaría a sefanjes (sephankhes) y finalmente acabaría como esfinge.
Así, este pueblo creía que estos seres labrados en piedra por la noche cobraban vida y protegían las tumbas de sus amos por las noches.
Los egipcios realizaron grandes obras como lo son la Gran Esfinge de Guiza, y en menor tamaño decoraban templos y tumbas de los faraones quienes ponían su cara a estos seres.
En Grecia
En Grecia se habla bastante sobre las esfinges, llegando a existir varios tipos de esfinge, siendo la Crioesfinge la que tiene cabeza de cordero, la que tiene cabeza de halcón, Hieracoesfinge y a las de Egipto Androesfinges.
La esfinge griega está más detallada teniendo, rostro y busto de mujer, patas de leon, cuerpo de perro, cola de dragón y alas de pájaro.
Inicialmente se dice por parte de Hesíodo, que es hija de Ortro, el hermano de Cerberos, y de la Quimera. No obstante más tarde, Laso de Hermíone dice que es hija de la divinidad primitiva, Tifón, y la Equidna.
En Grecia se la considera un ser un símbolo de destrucción y desgracia, también fue el emblema de la antigua ciudad-estado de Quíos, apareciendo en los sellos de las monedas de la ciudad.
En la mitología griega, se dice que Hera envió a la esfinge a Tebas, la ciudad de las siete puertas, y que durante un mal momento de la ciudad el único acceso de la ciudad. Así, la esfinge proponía a los que querían pasar su acertijo y si no se acertaba morían asfixiados por las garras de esto. Esto siguió así hasta que Edipo llegó a la ciudad, acertó el acertijo y esta se suicidó.
Esfinges mesopotámicas
Representadas en el arte asirio, recibían el nombre de Lammasu, y al igual que en la mitología egipcia tenían un carácter protector y simbolizaba el poder.
En este culto, estaba representada con cabeza de hombre y cuerpo de león o toro, llegando a presentar a veces, alas, cuernos y orejas de toro.
En el sur y sudeste asiático
La esfinge en las distintas regiones del sur y sudeste asiático proviene de una influencia helenística, debido a una influencia sobre el budismo. Así, se trata de una criatura protectora, llegando a quitar pecados y proteger del mal.
Toma muchas formas a lo largo de la región, y muchas funciones, así como nombres que generalmente significan “hombre-bestia”, “hombre-león”, “hombre-gato”.
Así mismo, cabe destacar que en las otras mitologías al tratarse de culturas “muertas”, a la figura de la esfinge se la deja de lado en la cultura actual. No obstante, en estas culturas del sudeste asiático al no verse alteradas por el paso de los milenios aún es una figura importante.