El uniforme durante la Segunda Guerra Mundial era una pieza clave en el equipamiento de los soldados. La pieza más distintiva dentro de los uniformes quizás sea la chaqueta permitiendo a cualquiera reconocer a qué bando pertenecía su portador.
Las chaquetas son una parte muy importante del uniforme porque protegen a los soldados de las inclemencias del tiempo, como pueden ser la lluvia, el viento o la nieve.
Así mismo, las chaquetas a parte de proteger también debían de ser cómodas y ligeras para que durante la batalla no entorpecieran los movimientos del soldado.
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Chaquetas de aviador
Las chaquetas de aviador son la prenda más distintiva de los pilotos de aviones durante la segunda guerra mundial. Se trata de una prenda muy popular incluso hoy en día.
Se trata de unas chaquetas de cuero con un marrón seal, contando con un forro beige de seda hilada , cuello alzable y cierre de cremallera.
Este tipo de chaquetas ha marcado una moda y es el diseño de lo que actualmente se conoce como “cazadora bomber”.
Chaquetas de las SS
La policía militar alemana, al igual que muchos otros cuerpos, tenía su identificable chaqueta.
Esta se trataba de un uniforme gris, que luego pasaría al característico feldgrau (verde-gris), con una apariencia militar. En el brazo portaban un águila roja y una esvástica como identificativos.
Un detalle curioso sobre el uniforme de este cuerpo militar es que fue diseñado por la fábrica textil que más tarde sería conocida como Hugo Boss.
Chaquetas americanas en el Desembarco de Normandía
Durante esta parte de la guerra los soldados contaban con una chaqueta M-41 por una delgada tela de algodón llamada popelín de algodón, de color beige por el exterior y con un forro de color verde oliva.
El diseño de esta prenda está basado en el diseño de una prenda deportiva civil, además está diseñada para que sea resistente al frío y al agua, es decir impermeable.
Se trata de una chaqueta fundamentalmente diseñada para el combate, al contrario que algunas prendas clásica que podían ser usadas durante paseos o actos militares formales.
Se trata de una prenda ideal para el entretiempo, cuando no hace ni excesivo frío ni calor, porque es demasiado fina para el invierno y demasiado calurosa para el verano.
Durante la campaña de las Ardenas se tuvo que adaptar este modelo para poder soportar las bajas temperaturas de la zona.
Se trata de un modelo que pese tener una vida bastante corta es bastante debido a que el Desembarco de Normandía es un suceso muy conocido.
Chaquetas japonesas
Las chaquetas japonesas en unos inicios copiaba las chaquetas de los soldados alemanes, más tarde evolucionaría a mejorarse por las mejores técnicas.
Inicialmente estas chaquetas eran de un color azul y no tenían bolsillos, pero con la llegada de las nuevas eras los japoneses cambiaron el color de los uniformes por caqui y añadieron multitud de solapas y bolsillos a las chaquetas de sus uniformes.